MEmpr.org
https://www.emprendedorasdechile.org/
Deudas
https://www.tenlaclara.cl/
--..--
Radio Agricultura
@DesafioDigital_
Lu.28 Sept. Este lunes @AlexTudorB y Mario Fernández, especialista en TI, conversarán con Vladimir Glasinovic @glasinovic , Dir. Ejec. de Talento Digital @tdparachile, de @fundacionchile y @KodeaOrg, sobre reconversión del #capitalhumano.
Viernes 25 Sept.
En el primer bloque de este viernes, @AlexTudorB y @DomingoLama conversarán con Fridrik Grimsson, CEO y cofundador de DRIZIP, una aplicación que permite el arriendo de automóviles entre particulares mientras están en desuso.-
En el segundo bloque de hoy @AlexTudorB y @DomingoLama estarán con Horacio Llovet @DoctorPega, hablando sobre v, empresa chilena-argentina que usa la #gamificación para optimizar la selección de personal. #recursoshumanos .-
https://www.tuprimerapega.cl/
Ju.
Aaron Cassorla, CEO de Omnix: “Con #inteligenciaartificial y #machinelearning somos capaces de medir y analizar el impacto futuro que genera cada error dentro de la cadena logística, para que las máquinas tomen decisiones en base al análisis que generan”. #DesafíoDigital .-
--..--
Cyrano de Belgerac - 1950
https://es.wikipedia.org/wiki/Cyrano_de_Bergerac_(película_de_1950)
https://es.wikipedia.org/wiki/Internet_Archive
https://archive.org/
-..-
https://www.youtube.com/watch?v=1h2tFIAT2do&feature=youtu.be
Jose Luis Cordeiro
https://www.cordeiro.org
1.- Marvin Minsky
2.- Ray Kurzweil
La Singularidad
está cerca: Cuando los humanos transcendamos la biología
3.- El año 2045
será año de la singularidad tecnológica
4.- Genoma
humano
--..--
5.- Sir Arthur
C. Clarke - Odisea del Espacio
https://es.wikipedia.org/wiki/Arthur_C._Clarke
6.- NBIC
7.- Info
128GB
3Gb x pers
42 pers
8.- IOT
Coches
Eléctricos
Google -
Globos
Facebook -
Drones
Microsatélites -
Elon Musk
Wikipedia
IBM
Deep Blue -IBM
Watson - Doc
Alfa Go
Cognotecnología
Exocortex
Google, la 3
mitad y las 4 partes del cerebro
Cybathlon
Olimpiadas
--..--
Medium - Blog
T.13
EMPRENDEDORES
https://www.t13.cl/en-vivo
--..--
https://lasdequeso.cl/carrito/
http://www.fuentemardoqueo.cl/
1:33
Cuando se está bautizado en el desierto
no existe otra salvación.
Cuando marchamos siento que todo
se queda tras nosotros.
Cuando caminamos por el desierto
solo nos siguen las sombras,
como para recordarnos,
nuestras vidas pasadas...
--..--
Omar Khayyam
https://es.wikipedia.org/wiki/Omar_Jayam
--..--
https://www.oshogulaab.com/SUFISMO/TEXTOS/KAIYYAM1.html
Los Rubaiyat.-
Más
allá de los límites de la Tierra, más allá del límite Infinito,
buscaba
yo el Cielo y el Infierno.
Pero
una voz severa me advirtió: "El Cielo y el Infierno están en ti."
Tuve
grandes maestros.
Llegué
a estar orgulloso de mis progresos.
Cuando
recuerdo que fui sabio,
me
comparo a ese líquido que llena el vaso y toma su forma,
y
a ese humo que el viento desvanece.
Convéncete
bien de esto: un día, tu alma dejará el cuerpo
y
serás arrastrado tras un velo fluctuante entre el mundo y lo incognoscible.
Mientras
esperas, ¡se feliz!
No
sabes cuál es tu origen e ignoras cuál es tu destino.
Bebedor,
jarro inmenso, ignoro quien te formó
Sólo
sé que eres capaz de contener tres medidas de vino y que la muerte te quebrará
un día.
Entonces
dejaré de preguntarme por qué has sido creado.,
por
qué has sido dichoso y por qué no eres más que polvo.
¿Cuándo
nací? ¿Cuándo moriré?
Nadie
puede evocar el día de su nacimiento ni señalar el día de su muerte.
¡Ven
a mí, ángel amada!
Quiero
pedir a la embriaguez olvidar que nunca sabemos nada.
¡Señor,
oh señor, contéstame!
Tú
nos has dado ojos y permitido que la belleza de tus criaturas nos deslumbre.
Tú
nos has otorgado la facultad de ser dichosos. ¿Quisieras que renunciáramos a
gozar de los bienes de este mundo?
¡Pero
si es tan imposible como invertir una copa sin derramar el vino que contiene!
Buscar
la paz en este mundo es una locura.
Creer
en el reposo eterno, también.
Después
de muerto, breve será tu sueño:
renacerás
en el césped que todos hollan o en la flor que el sol marchito.
Admitamos
que hayas resuelto el enigma de la creación.
¿Cuál
es tu destino?
Admitamos
que hayas podido despojar de todos sus vestidos a la Verdad.
¿Cuál
es tu destino?
Admitamos
que hayas vivido cien años dichoso y que vayas a vivir otros cien más.
¿Cuál
es tu destino?
Los
sabios y filósofos más ilustres han caminado entre las tinieblas de la
ignorancia.
Sin
embargo, eran los luminares de su época.
¿Qué
hicieron?
Pronunciaron
algunas frases confusas y luego se durmieron.
Mi
nacimiento no aportó el menor provecho al universo.
Mi
muerte no disminuirá su inmensidad ni su esplendor.
nadie
ha podido explicarme jamás por qué he venido,
ni
por qué partiré.
¿Qué
es el Mundo? Una parte pequeña del espacio
¿Qué
es la ciencia? Palabras.
¿Y
qué son las naciones, las flores y las bestias? Sombras.
¿Y
tus continuos, tus inquietos cuidados? Sí lo nada en la nada.
Se
nos da un breve instante para gustar del agua en este ardiente páramo.
Ya
el astro de la noche palidece.
La
vida va a llegar a su término: el alba de la Nada.
Vamos,
pues, date prisa.
¡Actúa
con prudencia, viajero!
Peligroso
es el camino que transitas y afilada la daga del Destino.
No
te hartes con las almendras dulces.
Contienen
veneno.
Procede
de forma que tu prójimo no se siente humillado con tu sabiduría.
Domínate,
domínate. Jamás te abandones a la ira.
Si
quieres conquistar la paz definitiva,
sonríe
al Destino que te azota y nunca azotes a nadie.
Confórmate
en este mundo con pocos amigos.
No
busques propiciar la simpatía que alguien te inspiro.
Antes
de estrechar la mano de un hombre,
piensa
si ella no ha de golpearte un día.
¡Cuán
pobre el corazón que no sabe amar,
que
no puede embriagarse de amor!
Si
no amas, ¿cómo te explicas la luz enceguecedora del sol
y
la más leve claridad que trae la luna?
Sabes
que no tienes poder sobre tu destino.
¿Por
qué esa incertidumbre del mañana ha de causarte miedo?
Si
eres sabio, goza del momento presente.
¿El
porvenir? ¿Qué te puede traer el porvenir?
He
aquí la estación inefable, la estación de la esperanza,
la
estación en que las almas sedientas de otras almas buscan una quietud perfumada.
¿Cada
flor, es acaso la blanca mano de Moisés?
¿Cada
brisa, es acaso el tibio aliento de Jesús?
No
marcha seguro por el Sendero el hombre que no ha recogido el fruto de la verdad.
Si
pudo cosecharlo del árbol de la Ciencia,
sabe
que los días pasados y los días por venir
en
nada se distinguen del alucinante primer día de la Creación.
En
la feria que atraviesas, no procures encontrar algún amigo.
Tampoco
busques sólido refugio.
Con
ánimo valiente, acepta el dolor sin la esperanza de un remedio inexistente.
Sonríe
ante la desgracia y no le pidas a nadie que te sonría: perderás el tiempo.
Renuncia
a la recompensa que merecías.
Si
feliz. No te lamentes por nada.
No
anheles nada. Lo que te ha de suceder,
escrito
está en el libro que hojea al azar el viento de la Eternidad.
¡Qué
misterio el de esos astros que ruedan en el espacio!
Khayyám:
aférrate con fuerza a la cuerda de la Sabiduría.
¡Cuidado
con el vértigo que,
a
tu alrededor, derriba a tus compañeros!
Un
religioso dijo a una ramera: 'Estás ebria,
atrapada
a cada momento en una nueva trampa'
Ella
respondió: 'Oh, Señor, yo soy lo que tú dices,
y
tú, eres lo que aparentas?
En
el vértigo de la vida sólo son felices
los
que presumen de sabios y los que no tratan de educarse.
Me
incliné sobre todos los secretos del Cosmos y retorné a la soledad
envidiando
a los ciegos que hallé por el camino.
Quien
me trajo a este mundo sin duda sabe dónde
me
arrojará después. Nada ni nadie puede cambiar su decisión.
Bebamos,
jovenzuelo.
¿Para
qué he de esforzarme en variar lo invariable?
Cierra
tu libro y piensa. Mira impasible al Ciclo
y
a la Tierra. Da al pobre la mitad de tus bienes,
perdona
las ofensas, no le hagas daño a nadie
y
apártate a un rincón si quieres ser dichoso.
Acepta
cualquier goce que pueda
ofrecerte
la Vida. No creas que haya alguien
que
cuente nuestros vicios y virtudes. Desprecia
lo
que robarte pueda un momento dichoso.
Ven
conmigo hasta el límite del desierto, que acaba
lo
fértil y comienza lo yermo, el sitio donde
no
pueden distinguirse ni príncipes ni esclavos.
Al
Sultán en su trono podrá compadecer.
Pretender
que el humilde devuelva en oro el plomo
que
a él le han arrojado, y exigirle que pague
una
deuda que nunca con nadie ha contraído,
es
comercio de usura al que nadie está obligado.
¿Tienes
miedo al mañana? ¡Tonto! Sé confiado.
Para
justificar ese temor, que acecha la desgracia.
No
quieras consejos ni lecciones
sabias.
Nuestro destino será siempre insondable.
Las
alas de la noche reposan sobre el alba.
Se
habla de aquel que crea al ser y lo destruye.
No
comprendo la obra del Creador. Dame vino
del
que enternece el pecho y alegra la memoria.
No
encontrarás en este bazar un solo amigo.
Atiende
mi consejo: Renuncia a todo apoyo.
Acepta
la desgracia; no le busques remedio.
No
esperes compasión, feliz en tu desdicha.
Hay
muchos que se afanan en reunir riquezas,
y
otros, en cambio, las dispersan al viento.
Nadie
se truena en oro al morir. Un cadáver
no
es más que carroña, pasto de los gusanos.
Un
pan consigue para dos jornadas y luego
en
el fondo de un jarro con un poco de agua fresca.
¿Por
qué ha de estar un hombre por otro sometido?
¿Por
qué se ve obligado a servir a su prójimo?
Todos
saben que nunca susurré una plegaria
que
nunca intenté encubrir mis defectos.
No
sé si existe una clemencia, Pero si existe
me
siento perdonado, pues sincero fui siempre.
Por
este destartalado mundo,
cuyas
únicas puertas son la noche y el día,
¡qué
de altivos sultanes fastuosos y opulentos
pasaron
un instante, y luego se marcharon!
No
pretendo pedir perdón de mis culpas,
pues
hablar con Alá lo creó irreverente.
Sólo
le bastaría cubrirme con el manto
de
su clemencia, para hacerme inmaculado.
Debajo
del destino que inexorablemente,
eterno
e impasible, sin cesar gira y gira,
sabrás
que sólo existen dos grupos dichosos:
los
que lo saben todo, los que no saben nada.
Igual
que una linterna mágica es el destino
en
torno del cual vamos todos girando:
la
lámpara es el sol, el mundo la pantalla,
nosotros
las imágenes que pasan y se esfuman.
Cielo,
infierno, esperanzas, temores...
¡Bah!
Que traigan de beber. Una cosa es cierta:
que
la vida va pasando, y el resto vaciedad es.
La
flor marchita nunca florecerá de nuevo.
La
pelota lanzada a derecha e izquierda,
de
abajo a arriba, nada pregunta al que la arroja.
Quien
lanzó a este mundo sabrá por qué lo hizo.
Nadie,
nadie lo sabe, sino él únicamente.
Dejemos
que los sabios parloteen
Nada
de lo que dicen es cierto, excepto que la vida es muy breve.
Se
fue la flor marchita para siempre;
el
resto es mentira y locura.
Encontrar
quise en vano el Cielo y el Infierno
más
allá de la Tierra y aun del Infinito.
Pero
una voz me dijo. " ¡Necio! Cielo e Infierno,
hasta
el fin de los siglos, viven sólo en ti mismo".
El
dedo del destino tan solo una palabra
escribió
antes de irse. Nada, ni la inteligencia,
ni
el amor, ni la compasión, hará que se retracte.
No
hay lágrimas bastantes para poder borrarla.
Entonces
llamé al Hado, preguntándole
¿Es
posible que el destino nos lleve entre tinieblas?
Y
el Hado me respondió: "jamás preguntes nada
y
déjate llevar por el más ciego instinto".
Señor,
en mi camino tendiste mil celadas.
Después
me amenazaste: " ¡Ay de ti si no sabes
escapar
estos peligros! " Lo ves, lo sabes todo.
¿Acaso
puedes reprochar mi rebeldía?
El
hombre es solo un títere que el Destino maneja
a
su antojo. El Destino nos empuja
al
tablado del mundo, pero cuando siente Hastío
no
duda en arrojarnos al cajón de la Nada.
El
Destino, que con todo termina, acabar puede
con
tu alma y la mía. Vaciemos ya las copas
y
vamos a tumbarnos en el césped, pues pronto
sobre
nuestras cenizas ha de crecer la hierba.
Nunca
te atormentes por lograr oro o plata.
Antes
de que tu aliento se enfríe, haz lo posible
por
disfrutar tus bienes con un amigo, antes
de
que tus enemigos los derrochen si mueres.
Importa
muy poco que vivas cien, mil años,
pues
llegará un momento en que será preciso
que
abandones tu vieja taberna. Porque aunque seas
sultán
o pordiosero, al fin lo mismo vales.
En
un ruinoso alcázar que elevó en otro tiempo
sus
cúpulas al cielo, y del que hasta los reyes
besaron
sus umbrales, escuché a un ave
que
preguntaba: "¿Dónde? Dime, ¿dónde, dónde?
¿Te
entristece tal vez que no te recompensen
cual
mereces? Olvida y no te apenes. Todo
cuanto
deba llegarte, escrito está en el libro
de
lo eterno, que el viento al azar va hojeando.
El
Cielo es la visión de un ideal que puede
llegar
a realizarse. El Infierno es un símil
del
espíritu ardiente que ha surgido del caos
para
volver al caos, aun cuando sea tarde.
Puesto
que nuestra estancia en el mundo es precaria,
es
absurdo vivir sin amor y sin vino.
¿A
qué discutir sobre el mundo? Cuando muera
no
ha de importarme nada que fuese o no creado.
Desprecia
a aquel que no ama la belleza.
Repugnante
es el ser carente de pasiones.
Indigno
es él del sol que alumbra, y de ese beso
con
que suele aplacar nuestras penas la Luna.
Si
ha sido Dios el que creó los seres,
¿Por
qué tan pronto tiene que destruirlos?
Si
son feos e imperfectos, ¿quién tiene la culpa?
Y
si bellos y buenos, ¿para qué aniquilarlos?
No
pretendas Khayyam, descifrar el enigma
de
la Vida, que es sólo una ficción. Lo eterno
es
una copa llena de burbujas; tú eres una.
Goza,
no pienses en el cielo o el infierno.
A
nadie le pedí vivir. Por eso
me
esfuerzo en acoger indiferente lo que
me
regala la vida. ¿Por qué tendré que irme
ignorando
a qué debo mi paso por la tierra?
Ya
ha pasado el tiempo de mis hermosos años.
Se
fue la primavera de mi vida, y el ave
de
juventud ha levantado su vuelo rapidísimo.
No
sé cuándo ha venido ni cuándo se ha marchado.
Frecuenté
mucho el trato de sabios y de doctos
en
mi edad juvenil. Grandemente admiraba
doctrinas,
teorías... Pero al dejar sus aulas
estaba
más confuso que al penetrar en ellas.
Lo
mismo que ellos, yo sembré la semilla
de
la sabiduría, y me he sacrificado
para
que germinase. Coseché estas verdades:
que
vine como el viento, que me iré como el agua.
A
través de lo ignoto, mi alma tuvo empeño
en
descorrer el velo del más allá. De pronto
volvió
y me dijo esto. "¿Sabes? He comprobado
que
el ciclo y el infierno se encuentran en mí misma".
Te
hasta saber que todo es un misterio:
la
creación y el destino de la Tierra y el tuyo.
Sonríe,
pues, ante ellos. No sabrás nada más
cuando
hayas franqueado las puertas de la nada.
Una
vez encontré en la taberna a un sabio venerable
"¿Qué
puedes -le pregunté- decirme
de
aquellos que se fueron? " "Bebe -dijo solícito-,
porque
muchos marcharon, pero ninguno ha vuelto".
¿Por
qué debe inquietarme lo que oculta el futuro?
desgracia
persigue al hombre temeroso.
Alégrate,
no tomes la vida muy en serio:
las
dudas no alteran el curso del destino.
No
seas vanidoso. No llegarás al fondo
de
las casas. En paz deja al Mundo y al Cielo.
Olvida
todo aquello, que nada te importe.
Piensa
que Alá jamás te ha consultado.
Para
caminar seguro por la vida, primero
has
de tomar el fruto de la Verdad del árbol de la Ciencia.
Sabrás
que el pasado y el futuro son,
como
el día de la Creación, espantosos.
Hay
quien medita sobre la religión por gusto.
Hay
otros que vacilan entre Certeza y Duda.
incluso
surgirá un heraldo de pronto, que les grite :
¡Estúpidos!
La senda no es ésta sino aquélla".
Muchos
santos y sabios pasáronse la vida
discutiendo
del mal y del bien.
Pero
el eco burlose de ellos cual de falsos
profetas,
y sus bocas se llenaron de polvo.
¿Es
posible sondear la Noche? ¿Quién podría
oscurecer
su albura? Vano empeño saberlo.
¡Adán
y Eva! Su primer beso, ¡qué horrible!
Con
él nos engendró, rebosantes de angustia.
¿Al
mundo, a qué venimos? ¿Por qué nos vamos?
¿Qué
quiere esta existencia que nos ha sido impuesta
Arden
las almas y se convierten bajo su peso
en
ceniza, pero yo no veo la hoguera.
Unos
se vanaglorian de una ciencia vacía.
Otros
siguen creyendo en las bellas huríes y el Edén.
Cuando
el Velo se descorra,
se
verá que todos se extraviaron lejos, muy lejos.
A
esa bóveda inmensa que llamamos cielo,
bajo
el cual vivimos y morimos los hombres,
no
intentes levantar tus ojos implorantes.
No
dudes que ella gira, como tú y yo, impotente.
Me
dieron la existencia sin consultar conmigo.
Luego
aumentó la vida día a día mi asombro.
Me
iré sin desearlo, y sin saber la causa
de
la llegada mía, mi estancia y mi partida.
Cuando
el dolor te doble, cuando agotes tu llanto,
recuerda
las gotas de lluvia que brillan en las hojas.
Y
cuando te irrite el día y quieras noche eterna,
no
olvides el despertar de un niño.
Confieso
que si he entrado, devoto, en la mezquita
no
ha sido únicamente para orar,
sino
porque cogí hace ya algún tiempo de allí un tapiz hermoso.
El
tapiz se hizo viejo ... y he vuelto a la mezquita.
En
primavera suelo pasear por los prados floridos, meditando.
Pero
en cuanto me ofrecen una copa de vino,
olvido
todo enigma. De no hacerlo sería
mucho
menos que un perro.
Me
digo, ¿qué es mejor, si ir a la taberna
y
arrepentirme luego, o inclinarme en el templo?
Bebamos,
que no quiero saber si tengo amo
ni
que ha de ser de mi cuando me echen del mundo.
En
iglesias, mezquitas y sinagogas, sólo
se
refugian los débiles que temen al infierno.
Aquel
que bebe vino, en su pecho no siembra
la
mala semilla del ruego y el espanto.
Llegó
la primavera, la estación en que nuestros
impacientes
deseos buscan la perfumada soledad.
Cada
flor, ¿será la blanca mano
de
Moisés, y la brisa, grato aliento del Señor?
La
primavera, un arroyo que cruza
un
prado en flor, efebos... Beber quiero,
porque
a aquellos que beben cuando despuntaba el alba
nada
les preocupan iglesias ni mezquitas.
No,
no merezco entrar en mezquitas e iglesias.
Dios
sabrá de qué barro me amasó. Como un pobre
infiel,
o una muchacha fea, soy. De fortuna
carezco,
y de esperanzas en una mejor vida.
El
barro con que fue hecho el primer hombre,
para
moldear al último ha de servir un día.
Y
cuanto en la primera madrugada fue dicho,
repetido
será el último atardecer.
Abriré
mi pecho. Mi regla de conducta
es
hacer cuando quiero todo, a despecho toda
moral
o conveniencia. En nada, en nadie creo.
No
amo a nadie, y tampoco tengo fe ni esperanza.
Imagínate
el mundo ordenado a tu gusto,
Supón
que has terminado de leer ya la carta,
que
has gozado cien años a tu antojo y que puedes
vivir
cien años más del mismo modo. ¿Y luego?
Entre
impiedad y fe tan sólo un soplo existe,
así
como también separa un simple soplo
dudas
y convicciones. Goza el soplo presente,
que
está la vida entera en el soplo que pasa.
Los
dioses, adorados por mí tan largo tiempo,
una
mala pasada me gastó. Entonces
puse
toda mi gloria de una copa en el fondo
y
la cambié gustoso por un bello cantar.
La
esperanza del Hombre se desvanece rápido,
como
el humo. Si se realiza es parecida
a
los copos de la nieve que caen en las arenas
del
desierto. Fulguran un instante y se funden.
Ven,
siéntate y apura a mi lado esta copa.
Escucha
lo que dice el arpa. "Aquí se hallaban
los
salmos de David". Del pasado y futuro
no
te ocupes, y goza del presente, que es cierto.
Juré
cambiar un día. Quise hacer penitencia.
Seguro
que estaba ebrio en aquel momento.
Cargada
de rosas, llegó la primavera
y
se redujo a nada mí tan frágil propósito.
El
pescado le dijo al pato en la olla
"¿Crees
tú que algún día se secarán los mares?"
Y
el pato contestó. "Cuando estemos asados,
¿qué
importa que el mar sea un yermo, o un mar la tierra?
Débiles
son los hombres, y su Hado inevitable,
¡Cuántos
juramentos son olvidados! Queda
la
conciencia, también obro yo como un loco.
Estar
ebrio de vino y amor es mi culpa.
¿Te
tienes por discreto? En tal caso, bien puedo
decir
lo que fue Adán en su primera aurora:
tan
sólo un pobre diablo amasado con penas
y
que un día vivió clamando por la noche.
Natura
crea la rosa y la destruye luego,
volviéndola
a la tierra. Si en vez de agua
aspirasen
las nubes, hasta el último día
del
mundo, llovería sangre de enamorados.
En
el prado que llega a la orilla del río
que
sabe nuestros sueños, túmbate dulcemente.
Tal
vez su césped haya surgido de algún cuerpo
que
en otro tiempo fue perfectamente hermoso.
Mira
el capullo transformándose en rosa.
Fíjate
cómo abre sus pétalos, y, alegre,
anuncia
su venida a este mundo. Mi bolsa,
abriré,
derramando en el jardín el oro.
Si
sacude con fuerza el árbol de la verdad,
verás
caer un fruto que dirá. "Lo mismo
es
el hoy que el ayer. Los días primeros y últimos
serán
para nosotros exactamente iguales".
Sueño
sobre la tierra. Sueño bajo la tierra.
Sobre
la tierra, bajo la tierra, cuerpos tendidos.
Nada
en todas partes. Desierto de la nada.
Unos
hombres llegan. Otros se van.
Me
pregunto qué poseo verdaderamente.
Me
pregunto qué subsistirá de mí después de mi muerte.
Nuestra
vida es breve como un incendio. Llamas que se olvidan,
cenizas
que el viento dispersa: un hombre ha vivido.
El
vasto mundo: un grano de polvo en el espacio.
Toda
la ciencia de los hombres: palabras.
Los
pueblos, las bestias y las flores de los siete climas: sombras.
El
resultado de tu meditación perpetua: nada
¿Qué
se habrá hecho de todos mis amigos? ¿La Muerte los ha pisoteado?
¿Dónde
están todos mis amigos, qué es de ellos?
Oigo
aún sus cantos en la taberna. ¿Están muertos
o
están ebrios de haber vivido?
Los
sabios no te enseñarán nada,
pero
la caricia de las largas pestañas de una mujer te revelará la felicidad.
No
olvides que tus días están contados y que pronto serás la presa de la tierra.
Cómprate
vino, llévatelo aparte y luego déjate consolar.
Tú
no ves más que las apariencias de las cosas y de los seres.
Te
das cuenta de tu ignorancia, pero no quieres renunciar a amar.
Aprende
que Alá nos ha dado el amor
de
la misma forma que ha dado veneno a ciertas plantas.
Me
dicen: «¡No bebas más, Khayyam!»
Yo
les digo: «Cuando he bebido,
oigo
lo que dicen las rosas, los tulipanes y los jazmines.
Digo,
incluso, lo que no puede decirme mi bien amada.»
Tal
olor a vino emanará de mi tumba,
que
todo aquel que pase cerca se embriagará.
Tal
serenidad rodeará mi tumba,
que
los amantes no podrán alejarse de ella.
Más
allá de la Tierra, más allá del infinito,
intentaba
ver el Cielo y el Infierno,
Y
una voz solemne me dijo:
«El
Cielo y el Infierno están en ti»
¡Un
poco más de vino, mi bien amada!
Tus
mejillas no tienen aún el resplandor de las rosas.
¡Un
poco más de tristeza, Khayyam!
Tu
bien amada va a sonreírte.
Cuando
yo ya no esté, no habrá más rosas, cipreses,
labios
rojos ni vino perfumado.
No
habrá más albas ni crepúsculos, alegrías ni penas.
El
universo no existirá,
pues
su realidad depende de nuestro pensamiento.
Lámparas
que se apagan,
esperanzas
que se encienden.
Aurora.
Lámparas que se encienden,
esperanzas
que se apagan. Noche.
--..--
LIBROS .- YO: LA VIDA Y LA MUERTE (Spanish Edition) Edición Kindle Edición en Español de Francisca Berguecio Neira (Author)